Imagen 1. Lanza de 8 de enero de 1962, pág. 1. Detalle.
Tal dÃa como hoy a las seis de la tarde, se celebraba en las confluencias de las carreteras de San Lorenzo y El Viso, cruce de la finca de Carvajal, un responso por las vÃctimas del accidente de avión del dÃa 5 en el Cerro de la Monjina, término de San Lorenzo de Calatrava. Dos años antes se habÃa producido una catástrofe parecida cerca de Calzada de Calatrava.
El ABC de 7 de enero publicaba que el avión militar "Heinkel" que habÃa salido de la Base de Málaga el viernes 5 a las 11:35 de la mañana con dirección a Getafe (Madrid) y ocupado por cinco personas no habÃa llegado a su destino.
El último contacto fue con el aeropuerto de San Pablo (Sevilla). Trascurridas unas horas sin noticias de éste, "ocho aparatos de la Base de Málaga efectuaron vuelos de reconocimiento en las sierras cercanas a Madrid y a lo largo de todo el recorrido que se supone pueda haber seguido, y se ha puesto sobre aviso a las fuerzas de la Guardia Civil de toda la ruta".
Lo último que se sabÃa es que habÃan sufrido un accidente en las estribaciones de Sierra Morena, cerca de San Lorenzo de Calatrava. Dos dÃas más tarde el mismo periódico ya ubicaba la tragedia en el pico de "El Cerro de la Monjina" a unos 20 km de la localidad.
El avión:
En San Lorenzo sobre la una de la tarde se escuchó una gran explosión que el vecindario achacó al paso de un avión a propulsión.
Se trataba de un bimotor "Heinkel" 111. El Heinkel He 111 fue un avión alemán diseñado a principios de los años 1930 por los hermanos Siegfried y Walter Günter. Este diseño de Heinkel perduró después de la guerra con el CASA 2.111, realizado bajo licencia en España por Construcciones Aeronáuticas S.A. y que casi solo se diferenciaba del alemán en los motores. El descendiente del He 111 continuó en servicio hasta 1973, año en el que fue retirado.
Imagen 2. Bimotor "Heinkel" 111. Foto extraÃda de aquÃ.
El rescate de los cuerpos:
Casi en el lÃmite con la provincia de Jaén y a una altura en torno a los 1000 metros sobre el nivel del mar, tenÃa lugar el rescate de los cuerpos.
La benemérita organizó el servicio, a las autoridades se unieron muchos vecinos de San Lorenzo, quienes se volcaron con todos los medios posibles de entonces, según he sabido con la ayuda de animales de carga y demostrando la unión y la solidaridad de todo un pueblo ante la tragedia.
Gracias a las indicaciones de un guarda de la finca de Carvajal y de unos pastores de la zona pudieron llegar al lugar del siniestro, en torno a las cuatro de la tarde del sábado. La escena debió ser dantesca porque en palabras del Lanza: "encontrándose los restos del bimotor y de los cadáveres diseminados a varios centenares de metros unos de otros, pudiéndose sólo identificar los motores averiados. Los restos de los infortunados aviadores quedaron completamente deshechos y sin posibilidad de identificación".
Acudieron a San Lorenzo de Calatrava autoridades como el Gobernador Civil, D. José Utrera-Molina y el presidente de la Diputación, D. Izarra RodrÃguez, quienes fueron informados por el capitán de la Guardia Civil de que no habÃa supervivientes, (D. Prieto junto con el reportero D. RamÃrez Morales fueron quienes realizaron las únicas fotos). Estas autoridades pasaron la noche del sábado en San Lorenzo porque se desplazaron al lugar del suceso, donde no pudieron ascender debido a la niebla. El domingo se unÃan el coronel-jefe del Tercio de la Guardia Civil, D. Pelayo, dos comandantes, informadores del Ejército del Aire y un capitán a quien nombraron juez instructor. Ese dÃa subieron montados en caballerÃa y se unieron una patrulla de salvamento de la Base Aérea de Granada y varias ambulancias de Granada, Sevilla y Parque Central del Madrid con médicos y otro personal técnico. Esta perfecta colaboración es un hecho encomiable en aquellos años y con los austeros medios.
Las vÃctimas:
- El capitán piloto D. Eduardo Hidalgo de 45 años, casado y con dos hijos. Sus restos fueron trasladados a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).
- El sargento mecánico motorista de avión D. Rafael Fernández Almenta, destinado el Ala núm. 27, su anterior puesto fue en la Escuela de Reactores y quien fue inhumado en Málaga. A su madre Doña Isabel Almenta Román, le fue adjudicada la pensión mensual de 1.800 pesetas desde el 6 de enero de 1962, por la Delegación de Hacienda de Málaga mientras conservase la aptitud legal y estado de pobreza, desde el dÃa siguiente al del fallecimiento del causante.
- El cabo primero radiotelegrafista D. José Puerto Cámara, quien habÃa ascendido el 20 de abril de 1960 y destinado también en el Ala núm. 27, fue trasladado al cementerio de San Ginés Úbeda (Jaén).
- El cabo D. Rafael Guaco/Gascó, enterrado en Madrid.
- El cabo D. Rafael Otero, enterrado en Madrid.
D.E.P.
El funeral:
Imagen 4. Lanza de 8 de enero de 1962, pág. 1. Detalle. Momento del responso junto a la finca de Carvajal.
El dÃa 7 llegaban los restos de los aviadores al kilómetro 24, cruce de las carreteras de la finca Carvajal con la de San Lorenzo de Calatrava y Viso del Marqués. Fue el cura de San Lorenzo quien se encargó de rezar el responso por los fallecidos, en presencia de algunos familiares del capitán D. Hidalgo y del cabo primero D. Puerto Cámara. (ver imagen 4).
A continuación se formó una caravana hasta Almuradiel.
Aunque no pudo determinarse la causa del accidente, pudo deberse a alguna averÃa mecánica o a una tormenta de granizo, sumada a la intensa niebla y que le impidiera calcular un aterrizaje forzoso. Una pareja de la Guardia Civil de El Centenillo (Jaén) vieron el aparato y se percataron de un funcionamiento irregular, junto con una baja altura.
Por último, os comparto unas fotos del cerro en la actualidad, donde todavÃa pueden verse restos del fuselaje del avión (pincha sobre las imágenes).
Varias imágenes. Realizadas en el Cerro de La Monjina, término de San Lorenzo de Calatrava (Ciudad Real), aun con restos del fuselaje del avión.